miércoles, 10 de octubre de 2012

la productividad personal como competencia profesional

Por: davidrjordan

Como señala Alberto Barbero en su blog, la productividad personal es una de las competencias fundamentales que deberían contemplarse en todos los programas de desarrollo de personas.


La naturaleza del trabajo ha cambiado. Hoy muchas personas tienen la sensación de que su trabajo consiste en gestionar urgencias. Los buzones de entrada del email son como un virus que nos paraliza. Los modelos de “gestión del tiempo” ya no sirven para tener una perspectiva del trabajo ni para controlarlo y las relaciones personales se ven afectadas por el incumplimiento reiterado de compromisos. Sin embargo, y aunque muchos sigan atascados en la trampa y en el victimismo asociado, existe un método ya muy consolidado para ser eficaces ante este nuevo reto. Su nombre es GTD y algunos de sus beneficios son la productividad, la desaparición del stress, la eficacia y la generación de confianza en los equipos.



Los modelos de “gestión del tiempo” ya no sirven


David Allen en su libro Making it all work , traducido al español como Haz que funcione , describe toda una hoja de ruta para alcanzar esta competencia profesional tan amplia: la productividad personal.

Tomando como base la hoja de ruta trazada por Allen (y algún bonus), la mejora de la productividad personal se produce desarrollando las competencias generales y específicas que enumero a continuación, de tal forma que se sea capaz de:

COMPETENCIAS GENERALES


  1. Conseguir tener bajo control todos los frentes abiertos, organizando de forma sistemática toda la actividad.

  2. Orientar la actividad diaria a resultados concretos.

  3. Obtener la perspectiva necesaria para enfocar y evaluar la actividad desarrollada.

COMPETENCIAS ESPECÍFICAS


  1. Capturar las tareas, asuntos pendientes e ideas en cualquier momento y lugar.

  2. Liberar la mente, externalizando toda la información, ideas y asuntos pendientes en un sistema confiable.

  3. Aclarar sistemáticamente qué hay que hacer con cada cosa.

  4. Traducir los compromisos y asuntos pendientes en acciones.

  5. Organizar y clasificar las tareas, documentos e ideas en categorías que faciliten su rápida localización.

  6. Mantener un sistema de archivo sencillo, eficaz y actualizado.

  7. Revisar y actualizar periódicamente las tareas, proyectos e ideas.

  8. Mantener el compromiso de controlar lo que se hace e identificar el siguiente paso.

  9. Discriminar con agilidad qué hacer sobre la marcha, qué delegar y qué posponer.

  10. Simplificar la decisión de qué hacer en cada momento, teniendo en cuenta los factores estratégicos, los límites contextuales y las opciones de actuación.

  11. Mantener la concentración y evitar distracciones al ejecutar determinadas tareas.

  12. Planificar de forma natural y sencilla proyectos y actividades que requieran una sucesión de tareas.

  13. Elegir un sistema de organización adecuado a nuestra actividad.

  14. Incrementar la perspectiva sobre la actividad, identificando qué es necesario hacer para terminar los proyectos.

  15. Mantener el control sobre las áreas de responsabilidad e interés.

  16. Conseguir alinear la actividad con las metas y objetivos anuales.

  17. Tener una visión del resultado que se alcanzará a largo plazo.

  18. Elevar al máximo la perspectiva hasta identificar cuáles son los propósitos y principios que guían la propia vida.

¿Qué opinas?, ¿consideras suficientes estas competencias para mejorar la productividad personal? ¿Sobra alguna? ¿Están bien formuladas? ¿Qué cambiarías?


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